Aquí hay un Buen Psicólogo

Si estas buscando un buen psicólogo, aquí te vamos a ayudar a encontrarlo. Te vamos a indicar las claves que identifican a los mejores psicólogos, vas a aprender a reconocerlo, y sobre todo, te vamos a recomendar los psicólogos con mejor relación de calidad y precio. Todo ello lo vas a encontrar aquí.

La máxima del buen psicólogo

Para el buen psicólogo, todo gira alrededor del paciente. El paciente es el protagonista en el servicio de ayuda psicológica; es quien tiene un problema y a quién hay que ayudar. Los buenos terapeutas deben estar preparados para ayudarles con una buena estrategia, porque trabajar con la salud de los pacientes es muy delicado. Para evitar problemas es necesario que el servicio de terapia y las habilidades en la comunicación sean óptimos. 

La competencia cada día es mayor debido a que los servicios de los distintos psicólogos son similares y los pacientes buscan ser atendidos rápidamente y con calidad, recibir un buen servicio con precios razonables. De ahí que sea fundamental encontrar fórmulas para diferenciar el servicio a través de una mayor rapidez y una mayor calidad en el mismo.

Por lo tanto lo que identifica al buen psicólogo es la satisfacción de sus clientes: calidad, rapidez y precio.

No obstante, hay hasta ocho buenas prácticas que te van a permitir identificar a los buenos psicólogos.

Las ocho claves del mejor psicólogo:

Son las características o buenas prácticas que identifican a los buenos psicólogos. Son las siguientes:

Satisfacción del paciente

Los mejores psicólogos deben trabajar cada día para dar un buen servicio y satisfacer al cliente al cien por ciento. Recuerda que los pacientes son siempre lo más importante en cualquier servicio de ayuda psicológica, y que sin ellos no tendrían razón de ser los psicólogos. Por eso los mejores psicólogos están orientados principalmente a sus pacientes.

Ayuda Psicológica Inmediata

Se debe prestar un servicio de ayuda psicológica profesional rápido y jamás un paciente debe esperar para ser atendido. Un paciente que espera, probablemente no se sentirá correctamente atendido y eso no es lo que queremos. Necesitamos que los pacientes estén totalmente a gusto y en sintonía con su terapeuta para que la terapia sea efectiva. La ayuda psicológica debe ser siempre efectiva.

Involucrado personalmente, sin excesos

La vida de las personas se dividen en dos: personal y profesional. Cada uno debe preocuparse de que los problemas de cada ámbito sean aislados y no afecten en el otro ámbito. No es aceptable que si el psicólogo tiene un mal día, esto afecte a sus pacientes. Ellos no deben pagar las consecuencias por tener un mal día y el poco profesionalismo del terapeuta de no separar las áreas de su vida.

Pero al contrario, tampoco deben involucrarse en exceso con sus pacientes, de manera que los lazos de afectividad les impidan mantener la objetividad.

El buen psicólogo siempre es cercano y afín a sus pacientes, pero sin involucrarse en exceso.

Amabilidad

Cuando el paciente entra a la consulta, se convierte en lo principal para el buen psicólogo, desde el primer saludo hasta que este sale por puerta. Esto genera mayor confianza y el paciente tiene claro que en el lugar hay alguien que le puede prestar la ayuda que necesita. La amabilidad debe ser sincera y con respeto hacia la persona atendida.

Los clientes no se juzgan

Todas las personas que reciben terapia  deben ser tratadas igual. No hay que clasificarlos por la vestimenta, la apariencia, o la actitud. Para el buen psicólogo, la terapia es igual para todos sus clientes, tratará de prestarles a todos la misma ayuda psicológica.

Pacientes cómodos

La comodidad de los pacientes es fundamental, es por esto que hay que darles el espacio adecuado para realizar la terapia. n la terapia presencial, el psicólogo debe proveer de una silla cómoda, y adecuar la luminosidad de sala, sonido, música de fondo, olor, etc... para asegurar la comodidad del paciente.

En el caso de la psicología online el terapeuta debe hacer lo posible para mejorar el canal de comunicación (resolución, velocidad, ruidos, interferencias, micrófono audible, buena cámara, etc...) además de aconsejar al paciente para que elija bien las condiciones de su estancia (evitar ruidos en la casa, otras personas, teléfono, etc...)

El paciente puede expresarse

Cuando el cliente necesita la ayuda del psicólogo, debe sentirse libre de expresarlo, los buenos terapeutas deben ser capaces de escucharle y luego ayudarle. No sería una buena práctica interrumpir al al paciente, o no dejarle expresar sus necesidades. El terapeuta debe crear una atmósfera lo suficientemente cómoda para que el paciente se sienta libre de expresarse en todo momento.

Adaptarse a cada paciente

Todas las personas tienen tonos diferentes, diferentes formas de expresión y de comprensión y no pueden ser tratadas por igual. Es necesario que los terapeutas vayan al mismo ritmo de sus pacientes, con un lenguaje y unas capacidades de expresión en algunos casos más formales y en otros casos más sencillos. Un buen psicólogo debe ser hábil y no tener sólo un estilo para todas las personas.

Por encima de todo un buen psicólogo debe ser un buen profesional

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